Un equipo internacional de astrónomos ha encontrado un sistema binario cuyas estrellas orbitan en espiral y que con el tiempo se encontrarán, formando una supernova.
Se trata del sistema HD265435, ubicado a 1.500 años luz. Consiste de una enana blanca, estrella ‘muerta’ que ha quemado todo su combustible, y una subenana caliente que todavía está quemando helio. La enana, cuya masa es similar a la del Sol, es de tamaño de la Tierra mientras que la subenana tiene un volumen mucho más grande. La masa conjunta de las dos estrellas se estima en entre 1,3 y 1,9 masas solares.
Actualmente, las dos estrellas orbitan una alrededor de la otra aproximadamente cada 100 minutos. Dado que el brillo de la subenana varía con el tiempo, los científicos sugieren que ya está distorsionada —adoptando una forma similar a la de una lágrima— por la proximidad de la otra, más pesada. Evalúan que en unos 70 millones de años en el sistema nacerá una supernova del tipo Ia.
“No sabemos exactamente cómo explotan estas supernovas, pero sabemos que tiene que suceder porque lo vemos en otros lugares del universo”, indica Ingrid Pelisoli, integrante del equipo, en un comunicado de la Universidad de Warwick.
“Una hipótesis es si la enana blanca acumula suficiente masa de la subenana caliente, de modo que mientras las dos orbitan entre sí y se acercan, la materia comenzará a escapar de la subenana caliente y caerá sobre la enana blanca. Otra forma es porque están perdiendo energía debido a las emisiones de ondas gravitacionales, se acercarán hasta fusionarse. Una vez que la enana blanca gane suficiente masa con cualquiera de los métodos, se convertirá en supernova”, explica.
El descubrimiento se describe en un artículo publicado este lunes en la revista Nature Astronomy.