El presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, firmó hoy una orden ejecutiva en la que delínea la estrategia del gobierno para la regulación de bitcoin (BTC). En sí, el decreto ordena a las agencias federales del país que evalúen los riesgos y oportunidades que representan las criptomonedas para la seguridad nacional de Estados Unidos y su impacto en la economía de la nación.
La orden ejecutiva, la primera que se enfoca exclusivamente en el creciente sector de los activos digitales, ordena a las agencias federales que coordinen mejor su trabajo en el sector de las criptomonedas, aunque no establece posiciones específicas que la administración quiere que adopten las agencias.
Una declaración de la secretaria del Tesoro de EE. UU., Janet L. Yellen sobre la orden ejecutiva de Biden aparentemente fue publicada antes de tiempo y retirada poco después.
Sin embargo, reveló que el presidente ordena a las agencias gubernamentales que manejen un mismo enfoque. Esto con la idea de tener una perspectiva clara al momento de explorar los riesgos y oportunidades que representan las criptomonedas para el país y en torno a ello, garantizar políticas gubernamentales coordinadas.
La orden ejecutiva que se mantuvo en estudio desde octubre del año pasado, definirá seis «prioridades clave» para la administración: proteger los intereses de Estados Unidos, proteger la estabilidad financiera mundial, prevenir usos ilícitos, promover la «innovación responsable», la inclusión financiera y el liderazgo estadounidense.
La orden ejecutiva histórica del presidente Biden exige un enfoque coordinado e integral de la política de activos digitales. Este enfoque apoyará la innovación responsable que podría resultar en beneficios sustanciales para la nación, los consumidores y las empresas. También abordará los riesgos relacionados con las finanzas ilícitas, protegiendo a consumidores e inversores, y prevenir las amenazas al sistema financiero y a la economía en general.
Declaración de la secretaria del Tesoro de EE. UU., Janet L. Yellen sobre la orden ejecutiva de Biden.
Se contempla la protección de los consumidores, inversionistas y empresas de EE. UU., y se plantea como tema urgente la investigación y el desarrollo de una posible moneda digital de banco central o CBDC.
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Según Yellen, el Departamento del Tesoro trabajará en conjunto con el Departamento de Estado y el de Comercio, entre otros, para presentar un informe general sobre la industria de las criptomonedas.
«Debido a que las preguntas que plantean los activos digitales a menudo tienen importantes dimensiones transfronterizas, trabajaremos con nuestros socios internacionales para promover estándares sólidos y condiciones equitativas», agrega.
La orden de Biden establece un plazo de 180 días para que las agencias gubernamentales presenten sus informes sobre el papel que desempeñarán las criptomonedas en la actualidad, señalaron fuentes consultadas por Reuters.
Incluso no se descarta que los reguladores presenten nuevos argumentos y propongan reglas para poner a las criptomonedas bajo su dominio ahora que la Red de Ejecución de Delitos Financieros (FinCEN) advirtió sobre nuevas preocupaciones en torno a posibles intentos de entidades rusas de evadir las sanciones impuestas por Estados Unidos por la invasión a Ucrania.
Bitcoin puede respaldar los objetivos de seguridad nacional de EE. UU.
Desde que comenzó el conflicto entre Rusia y Ucrania, Bitcoin se ha mantenido en el centro de atención de Estados Unidos y un nuevo informe presentado por el Bitcoin Policy Institute (BPI) podría presentar pistas sobre cómo la administración Biden está analizando a Bitcoin.
El instituto argumenta que Bitcoin podría ayudar a Estados Unidos a navegar los posibles cambios en el orden monetario mundial, que podrían surgir tras la invasión de Rusia a Ucrania.
En ese sentido el Bitcoin Policy Institute recomienda que los funcionarios estadounidenses evalúen la durabilidad que podría tener el actual sistema monetario basado en el dólar estadounidense e identifiquen formas en que podría responder a un posible desafío a la hegemonía de su moneda. Además, argumenta que Bitcoin representa una oportunidad estratégica de seguridad nacional para que Estados Unidos reimpulse su fortaleza económica, contrarreste a los adversarios estratégicos y promueva los valores estadounidenses.
Un mundo en el que Bitcoin falla es un mundo en el que la reducción y el declive de EE. UU. son más probables. Un mundo en el que Bitcoin tenga éxito es un mundo en el que nuestro papel en el sistema global, aunque haya cambiado, puede durar mucho tiempo.
Informe del Bitcoin Policy Institute.
El documento expone que con un petróleo cada vez más caro y con una deuda cada vez mayor y tasas ya en cero, el gobierno necesitará tenedores de bonos dispuestos a aceptar tasas reales fuertemente negativas. Pero, «no tenemos la energía o la productividad necesario para pagar la deuda y aumentar nuestros niveles de vida, lo que requerirá aumentar la producción de unidades monetarias en dólares para evitar incumplimientos deflacionarios».
Más allá, el informe presenta dimensiones de cómo Bitcoin puede ayudar a los Estados Unidos a lograr objetivos estratégicos, como mantener la fuerza nacional, contrarrestar adversarios estratégicos, como China y mantener los valores de Estado.
En todo caso, desde el año pasado, los organismos de control y supervisión del sistema financiero de Estados Unidos habían anunciado una lista de tareas, todas relacionadas con la regulación de bitcoin y otras criptomonedas.
La Reserva Federal (Fed), la Oficina del Controlador de la Moneda (OCC) y la Corporación Federal de Seguros para Depósitos (FDIC), manejan una serie de pautas fijadas para para este año. Esto con el objetivo principal de «brindar mayor claridad sobre si ciertas actividades relacionadas con criptoactivos, realizadas por organizaciones bancarias, son legalmente permitidas».
