La compañía Transportación Marítima Mexicana (TMM) convirtió en una nueva unidad de negocio su astillero de Tampico, la cual denominó Infraestructura Marítima y está enfocada a la reparación naval en dique, muelle y puerto.
El astillero antes formaba parte de su división marítima. Consideró que su ubicación es “estratégica”, al estar cerca de instalaciones costeras de petróleo y gas, así como rutas comerciales clave entre los estados del sureste de Estados Unidos y México.
A través de su marca comercial Astilleros Internacionales de Tampico, además de proporcionar dichos servicios de reparación, brinda servicios costa afuera con especialidades en pailería, soldadura, tubería, sand blast, pintura mecánica y servicios eléctricos.
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Cuenta con dos diques flotantes para embarcaciones de hasta 3 mil 500 toneladas de desplazamiento, como buques abastecedores, remolcadores, chalanes y lanchas rápidas, no obstante, resaltó que ya está en proceso de sustituir uno de estos diques con la intención de recibir embarcaciones mayores.
El resultado de operación consolidado de la firma registró una utilidad de 4.3 millones de pesos en comparación con una pérdida de 99.9 millones de pesos observada en el mismo lapso un año antes.
El pasado 24 de enero, la firma anunció que la empresaria Vanessa Serrano Cuevas fue designada como presidenta de su Consejo de Administración, cargo que anteriormente era ocupado por José Francisco Serrano Segovia.
A partir de su Asamblea General Ordinaria de Accionistas, Flor de María Cañaveral quedó como vicepresidenta, cargo que había ocupado Vanessa Serrano desde septiembre de 2020.
