GlobalData prevé que los ingresos de este sector pasarán de 6.400 millones de dólares en 2020 a 10.600 millones en 2025, impulsados por el aumento de ciberataques tras la pandemia y la invasión a Ucrania.
La acelerada transformación digital generada por la pandemia y la escalada de las amenazas geopolíticas generadas por la invasión a Ucrania han sido dos factores clave en el aumento de los ciberataques a empresas. En consecuencia, la industria de los ciberseguros espera un periodo de rápido crecimiento según previsiones de GlobalData, que estima que el sector crecerá a un ritmo del 10% anual hasta 2025.
En detalle, la compañía prevé que el sector de ciberseguridad de la industria aseguradora pasará de 6.400 millones de dólares en ingresos en 2020 a 10.600 millones de dólares en 2025. En ese sentido, el informe destaca la importancia de que las aseguradoras cuiden su reputación, por un lado, frente al riesgo de sufrir ellas mismas un ataque, y por el otro, de no querer pagar las indemnizaciones a sus clientes víctimas de ciberataques.
Amrit Dhami, analista asociado de investigación temática de GlobalData, explica que “inevitablemente, la rápida transformación digital del sector de los seguros está impulsando el aumento del ciberriesgo. El sector está adoptando rápidamente las tecnologías digitales, incluyendo la nube, el internet de las cosas, la inteligencia artificial y el análisis de datos para competir con las insurtechs, satisfacer las demandas de los consumidores de personalización e interfaces digitales convenientes, y en respuesta a la pandemia COVID-19″.
“La guerra entre Rusia y Ucrania ha aumentado la probabilidad de que se produzcan ciberataques patrocinados por el Estado y dirigidos a infraestructuras críticas, operaciones militares y empresas. Estos ataques no sólo se dirigen a las aseguradoras, sino que dan lugar a costosos pagos y dañan la reputación de las que son reacias a pagar. Este fue el caso de Ace American, que fue demandada por su cliente Merck en 2022 por no cubrir sus pérdidas durante el ataque de ransomware NotPetya de 2017”, agrega.
Así, Dhami manifiesta que “el seguro cibernético es ahora mucho más arriesgado para las aseguradoras, ya que algunas bandas de ransomware se dirigen a empresas con pólizas de seguro cibernético, ya que es más probable que paguen un rescate. Por ello, no es de extrañar que aseguradoras como AXA y AIG se replanteen sus pólizas de ciberseguro para mitigar el mayor riesgo de pago mediante primas más elevadas y/o la reducción de la cobertura de los clientes”.