El origen de Tetris se remonta a la época de la Unión Soviética, cuando los juegos de computadora no eran tan comunes en el país y los pocos que había eran limitados por la falta de tecnología.
En ese contexto, Alexey Pajitnov, quien trabajaba como programador en el Centro de Computación Dorodnicyn de la Academia de Ciencias de la Unión Soviética en Moscú, decidió crear un juego que fuera divertido y desafiante, pero que pudiera ser jugado en una computadora de recursos limitados.
Así, en 1984, Pajitnov creó Tetris, un juego de rompecabezas en el que los jugadores debían encajar piezas de diferentes formas para formar filas completas y eliminarlas del tablero. A pesar de su simplicidad, el juego resultó ser adictivo y emocionante, y rápidamente se convirtió en un éxito entre los programadores de la Academia y sus amigos y colegas.
En poco tiempo, Tetris se difundió en la Unión Soviética y, en 1986, se exportó por primera vez a Hungría, donde se lanzó una versión comercial del juego para la plataforma Commodore 64. A partir de ese momento, Tetris comenzó a extenderse por todo el mundo, y pronto se convirtió en un fenómeno global.
La popularidad de Tetris se debió en gran medida a su jugabilidad simple pero adictiva, que lo hizo accesible a jugadores de todas las edades y habilidades.
Además, el juego tuvo la suerte de ser lanzado en una época en la que la industria de los videojuegos estaba experimentando un gran auge, lo que ayudó a que fuera ampliamente distribuido y promovido.
Con el tiempo, Tetris se convirtió en uno de los juegos más populares de la historia, disponible en múltiples plataformas y en diferentes versiones.
La historia detrás del éxito de Tetris, incluyendo sus conexiones con la Perestroika y la caída del Muro de Berlín, ha sido objeto de interés en el mundo del cine y la cultura popular, y ha inspirado a muchos otros diseñadores de juegos a crear sus propios juegos simples pero adictivos.
