La empresa emergente china Greater Bay Technology ha desarrollado un nuevo sistema de baterías llamado Phoenix Cell, que se acerca a las prestaciones de los coches de gasolina. Este sistema ofrece una autonomía de 1.000 kilómetros incluso en condiciones extremas de temperatura, y permite una carga completa en solo seis minutos.
Greater Bay Technology, que ha logrado una valoración de 1.000 millones de dólares en tan solo dos años, compite con otras grandes empresas de baterías en China, como Contemporary Amperex Technology Limited (CATL) y BYD.
Lo más destacado de Phoenix Cell es su capacidad para funcionar eficientemente en temperaturas extremas. A diferencia de otras tecnologías de batería, Phoenix utiliza materiales superconductores y cuenta con un sistema de gestión térmica que puede calentar la batería rápidamente de -20 a 25 grados Celsius en solo cinco minutos. Esto permite que la batería de iones de litio funcione sin problemas y se cargue en seis minutos, independientemente de las condiciones climáticas.
Aunque los fabricantes de automóviles eléctricos se esfuerzan por aumentar la autonomía de estos vehículos, aún queda un desafío importante por resolver: la infraestructura de carga en carreteras. Para lograr la transición a los coches eléctricos, como lo exige la Unión Europea (que pretende que el 40% de los coches sean eléctricos para 2030), es fundamental contar con más estaciones de carga públicas. Sin embargo, hasta el momento, seguimos lejos de tener la cantidad necesaria de puntos de carga para satisfacer la demanda.