El caso del ex empleado de Samsung acusado de robar información de chips continúa generando atención. Según un informe de Reuters, los fiscales de Corea del Sur han revelado detalles importantes, destacando la implicación de Foxconn, el fabricante taiwanés de componentes electrónicos más grande del mundo.
El ex ejecutivo de Samsung, Choi Jinseog, supuestamente obtuvo un contrato con Foxconn en 2018 para construir una nueva instalación. Sin embargo, según la acusación de los fiscales, Choi utilizó la red de proveedores de Samsung para robar información con el objetivo de ayudar a Foxconn a establecer su propia fábrica de chips.
Los fiscales afirman que el robo de información por parte de Choi causó más de 200 millones de dólares en daños a Samsung, basándose en estimaciones de los costos de desarrollo de la información sustraída. Aunque el dictamen de los fiscales no menciona directamente a Choi Jinseog, la prensa posteriormente lo identificó, así como su vínculo con Foxconn a través de su consultora, Jin Semiconductor.
Según el dictamen visto por Reuters, se revelan detalles de cómo Choi supuestamente robó secretos comerciales de Samsung y los presuntos planes de Foxconn para utilizar esa información en la construcción de una nueva planta de semiconductores. Aunque se ha confirmado que Choi ganó un contrato con Foxconn en agosto de 2018, él niega todas las acusaciones en su contra.
Además del robo de información de Samsung, los fiscales acusan a Choi de obtener ilegalmente información confidencial de la construcción de una fábrica de chips de dos contratistas. Según el dictamen, Choi utilizó información confidencial sobre la gestión de salas de limpieza de semiconductores, obtenida a través de un empleado de Samoo Architects & Engineers, empresa involucrada en la construcción de plantas de chips de Samsung en China.
El dictamen también menciona que Choi obtuvo ilegalmente planos de una planta de Samsung en China a través de un empleado de HanmiGlobal, encargada de supervisar la construcción y la distribución de instalaciones relacionadas con la fabricación de chips.
El abogado de Choi Jinseog ha negado rotundamente las acusaciones, argumentando que la información supuestamente robada no es exclusiva de Samsung y que existen estándares internacionales de ingeniería para la construcción de salas limpias. Además, el defensor afirma que la planta nunca se construyó, ya que Foxconn se retiró del acuerdo, una afirmación respaldada por una persona con conocimiento directo del caso.
Foxconn ha declarado que está al tanto de las especulaciones en torno al caso legal en Corea del Sur, pero el dictamen oficial no acusa a la empresa ni a los contratistas Samoo y HanmiGlobal de ninguna irregularidad. El caso se centra en las acusaciones contra Choi Jinseog.
Choi, quien alguna vez fue considerado una estrella en la industria de chips de Corea del Sur, trabajó para Samsung durante 17 años y fue reconocido por su contribución en el desarrollo de chips de memoria DRAM.
Según la acusación, la planta que Foxconn planeaba construir tenía la capacidad de producir 100,000 obleas por mes utilizando tecnología de chips de memoria DRAM de 20 nanómetros.
El juicio de Choi Jinseog y los otros acusados está programado para comenzar el 12 de julio, según los registros de la corte. Por el momento, no se han revelado detalles sobre las posibles sanciones que enfrentarán. Este caso está lejos de llegar a su fin y seguirá siendo objeto de atención en la industria de la electrónica.