México cuenta con una destacada infraestructura astronómica que incluye el Gran Telescopio Milimétrico Alfonso Serrano (GTM), el Observatorio de Rayos Gamma HAWC y su participación en el Gran Telescopio de Canarias (GTC) en España, lo que le ha permitido explorar distintas regiones del espectro electromagnético. Sin embargo, la integración de estas valiosas instalaciones con un nuevo telescopio óptico en San Pedro Mártir elevaría la posición de México en el campo de la astronomía internacional.
Según el astrofísico Fabián Rosales, la astronomía mexicana ha logrado una destacada presencia e importancia a nivel mundial. Sin embargo, a lo largo del tiempo, se ha visto afectada por la falta de medios para llevar a cabo observaciones propias, dependiendo cada vez más de colaboraciones internacionales para obtener datos.
Este telescopio, diseñado para captar 10 veces más luz que los telescopios ópticos mexicanos existentes, abriría un amplio abanico de nuevas posibilidades de investigación que actualmente no se podrían llevar a cabo.
Además de las posibilidades científicas que ofrece este telescopio, es importante destacar que el Observatorio de San Pedro Mártir se encuentra ubicado en el Parque Nacional Sierra de San Pedro Mártir. Esta nueva infraestructura no solo fortalecería la investigación astronómica en el país, sino que también contribuiría a generar conciencia en la comunidad sobre la importancia de preservar y proteger el entorno natural en el que se encuentra.
Según se lee en un artículo publicado en 2019 por los directores del proyecto, el telescopio permitirá realizar investigaciones de vanguardia en astronomía planetaria, galáctica, extragaláctica, cosmología, estudios del cielo variable y grandes catastros astronómicos.
¿Proyecto de telescopio en San Pedro Mártir se encuentra detenido?
La concreción de un ambicioso proyecto de telescopio en San Pedro Mártir, Baja California, ha quedado en una incierta situación. Según el investigador Fabián Rosales, desde su época como estudiante ya se hablaba de la construcción de un nuevo telescopio, pasando por diferentes tamaños, desde uno de 4 metros hasta uno de 8 metros. Finalmente, se decidió trabajar en uno de 6.5 metros, significativamente más grande que los telescopios ópticos existentes en México.
Después de años de discusión en la comunidad científica, en 2012 se logró un acercamiento entre el Instituto de Astrofísica de la UNAM, el INAOE y socios estadounidenses, la Universidad de Arizona y el Observatorio Astrofísico Smithsoniano. Estas instituciones operan en conjunto el Telescopio de Espejos Múltiples MMT de 6.5 metros en el Monte Hopkins, Arizona.
El diseño propuesto para el telescopio en San Pedro Mártir se basaba en tecnología probada en los telescopios de Magallanes en Chile, con algunas mejoras y actualizaciones tecnológicas. El telescopio tendría la capacidad de captar casi 10 veces más luz que los telescopios ópticos mexicanos actuales, abriendo nuevas vías de investigación que no serían posibles con las instalaciones existentes
Se buscó financiamiento del entonces Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), y junto con la UNAM y el INAOE, se obtuvo el dinero necesario para comenzar con el diseño del proyecto. Sin embargo, la construcción de un telescopio de este tipo es un proceso a largo plazo que requiere una gran cantidad de trabajo y financiamiento.
Para el proyecto, México se encargaría de la gestión, los edificios de soporte, la estructura del telescopio y sería co-propietario del sistema de óptica primaria de 6.5 metros junto con el INAOE, la Universidad de Arizona y el Observatorio Astrofísico Smithsoniano. El Centro de Ingeniería y Desarrollo Industrial (CIDESI-Conacyt) en Querétaro se encargaría del diseño de la estructura del telescopio, mientras que la empresa M3 en Hermosillo se encargaría del diseño del edificio, la cúpula y los servicios del telescopio. La Universidad de Arizona y el Observatorio Astrofísico Smithsoniano aportarían instrumentos, se encargarían de la óptica correctora y participarían en el laboratorio binacional con las instalaciones del telescopio MMT en Arizona.
El trabajo de diseño comenzó en 2013, y se proyectaba un plazo de construcción de cinco años a partir de la aprobación de los proyectos en 2019.
El valor total del proyecto sería aún mayor si se consideraran las contribuciones en especie, como los espejos primarios y secundarios, los instrumentos de primera generación, el sitio del Observatorio y el acceso al MMT. Sin embargo, el proyecto se encuentra estancado y congelado en este punto. Con el cambio de administración y la llegada de la nueva administración de Andrés Manuel López Obrador, el proyecto fue presentado ante el nuevo Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt). A pesar de las presentaciones, no se ha recibido respuesta oficial, lo que ha dejado el proyecto en una incierta situación.
El telescopio en San Pedro Mártir tenía un potencial científico significativo. Estaba diseñado para utilizar la técnica de espectroscopia, que permite analizar la intensidad de la luz en diferentes frecuencias y longitudes de onda, abarcando un campo celestial mucho más amplio que los telescopios convencionales. Además, su capacidad de captar 10 veces más luz abriría nuevas posibilidades de investigación en astronomía planetaria, galáctica, extragaláctica, cosmología, estudios del cielo variable y grandes catastros astronómicos.