Los accionistas minoritarios de la empresa Suave y Fácil acusan a Luis y a Samuel Epelstein por un posible quebranto de 600 millones de pesos en la compañía de ventas por televisión CV Directo
Los empresarios Karla Beatriz Zermeño, Hugo Pérez Pla y María del Pilar Cruz Robayo aseguran que los miembros de la familia Epelstein Rapapor cometieron actos que podrían configurarse en delitos en materia fiscal, administración fraudulenta, abuso de confianza y daño patrimonial entre otros.
Los accionistas minoritarios de CV Directo expusieron en demandas judiciales que los administradores de la empresa tomaron una serie de acciones, como contratar créditos por 200 millones de pesos con BBVA y CI Banco sin el consentimiento del consejo del consejo de accionistas.
Ante una serie de irregularidades administrativas de los Epelstein en CV Directo, los accionistas minoritarios pidieron “comprar o vender” la empresa, incluso acudieron a miembros de la comunidad judía, pero todo ha sido inútil.
Luis y Samuel Epelstein pretenden pagar las acciones a los minoritarios, 60% abajo del precio en el que estarían dispuestos vender. Y Hasta el momento han pagado más de 10 millones de pesos a sus abogados, particularmente a David Cohen, con recursos de la empresa y no con recursos propios.
A nivel internacional, se han presentado denuncias en Estados Unidos porque una parte de los 600 millones de pesos faltantes fueron enviados para sufragar gastos personales de los Epelstein en ese país.
El litigo ya involucra a American Express, a bancos extranjeros y a la Universidad de Nueva York, la cual aseguran, habría recibido pagos directamente de la empresa controladora de CV Directo.
