Basada en un modelo de economía circular, Reuse busca convertirse en un aliado clave para los retailers y en el cuidado del medio ambiente. La startup de origen chileno, especializada en la comercialización de tecnología reacondicionada, Reuse, levantó una ronda semilla por 4.5 millones de dólares.
Es importante señalar que la ronda estuvo liderada por Seaya Cathay Latam, donde también participan Silence VC, los fondos mexicanos Dalus Capital, Ignia, Ángel Hub y Compusoluciones Ventures, así como los fundadores de Cornershop.
De acuerdo con la empresa, que también tiene presencia en Chile y Perú, este capital lo utilizará para acelerar su crecimiento en México, invertir en tecnología para optimizar el funcionamiento de su plataforma y poder sumar nuevos partners.
Asimismo, entre los objetivos de Reuse destaca duplicar sus ventas totales a través de la comercialización de más de 100 mil productos de tecnología reacondicionada en los tres países en los que opera.
Compromiso con el Medio Ambiente
Según datos de las ONU, cada año se generan más de 60 millones de toneladas de residuos de aparatos eléctricos y electrónicos en todo el mundo, convirtiéndose en la basura que más rápidamente crece, entre un 16 y un 28 por ciento cada cinco años.
En este sentido, Reuse, fundada por Tomás Ulloa y Max Sateler, ambos con experiencia en la ingeniería comercial, es una empresa que reacondiciona tecnología a través de un software especializado que detecta la originalidad del producto y cada uno de sus componentes, para después comercializarla hasta 30% más económica que un producto nuevo y con una garantía de 24 meses.
El modelo de negocio de Reuse está basado en la economía circular, mediante el cual busca beneficiar al medio ambiente, a los retailers y al público en general. La compañía opera con empresas como Falabella, Coppel, Samsung, Oppo entre varios más, ayudando tanto en la comercialización de sus devoluciones bajo un modelo de Resale as a Service y también a través de los programas de Trade in.
Tomás Ulloa, cofundador de Reuse, destaca que “la misión de Reuse ha sido clara: proteger el medio ambiente al abordar el problema de los desechos tecnológicos”.
“Nuestro modelo beneficia al medio ambiente, ya que, en promedio, cada venta de un producto reacondicionado ahorra 77 kilos de CO₂. Además, el público en general puede ahorrar hasta un 30%, mientras que los minoristas pueden recuperar una mayor ganancia de sus saldos y productos devueltos”.
Planes en México
Con varios planes para este 2024, Reuse centrará sus esfuerzos en México. Luego de registrar ventas regionales por 15 millones de dólares en 2023, la empresa tiene como objetivo duplicar sus ingresos enfocados principalmente en el mercado mexicano.
Además, planea aumentar su red de socios y comercializar cerca de 70 mil unidades en el país. A su vez, tiene prevista la implementación de un software innovador capaz de detectar la originalidad y detalles de los productos a través del reconocimiento visual remoto, mejorando así la eficiencia de su proceso de reacondicionamiento.
Mercado de Tecnología Reacondicionada con Gran Potencial
El mercado de Tecnología Reacondicionada experimenta un impresionante crecimiento en medio de la demanda sostenible.
Según un informe de IDC, se proyecta que el mercado mundial de smartphones usados y reacondicionados crezca un 11.2% este 2024, alcanzando más de 351 millones de unidades.
Además, la calidad y el rendimiento de la tecnología reacondicionada han alcanzado niveles equiparables a los de los productos nuevos, lo que ha contribuido aún más a su popularidad entre los usuarios finales y las empresas.
De acuerdo con Counterpoint, el mercado de smartphones reacondicionados refleja un aumento a nivel internacional del 9%, superando el crecimiento del mercado de celulares nuevos, que registró una caída de más del 4% en 2023.
Finalmente, Max Seteler, cofundador de Reuse, refiere que “con un enfoque renovado en la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental, el mercado de tecnología reacondicionada está preparado para seguir prosperando en los próximos años.
“A medida que más consumidores adopten esta alternativa consciente, podemos esperar un impacto aún mayor en la reducción del desperdicio electrónico y la preservación de nuestros recursos naturales”, concluye.
