La creciente popularidad de los dispositivos móviles ha transformado la forma en que vivimos y trabajamos, pero junto con la conveniencia de las aplicaciones móviles, también han surgido riesgos de seguridad significativos. En México, la preocupación por la seguridad de las aplicaciones móviles ha aumentado considerablemente en los últimos años.
La empresa de ciberseguridad IQSEC ha lanzado una advertencia sobre los riesgos de seguridad que enfrentan los usuarios de dispositivos móviles en México. Según IQSEC, al menos 5 millones de aplicaciones disponibles en tiendas de aplicaciones como la App Store de Apple y Google Play representan una amenaza potencial para la privacidad y la seguridad de los usuarios.
Allan Morgan, líder de Ciber Legal de IQSEC, señala que cada vez que los usuarios instalan una aplicación en sus dispositivos móviles, están otorgando ciertos permisos y aceptando los términos y condiciones del servicio. Estos permisos a menudo incluyen el acceso a la cámara y la galería de fotos del dispositivo, lo que podría permitir que las aplicaciones recopilen información sensible y datos personales de los usuarios sin su conocimiento.
Una tendencia preocupante en los últimos meses ha sido la descarga de aplicaciones sin revisar detenidamente estos términos y condiciones, lo que expone a los usuarios a riesgos significativos de seguridad y privacidad.
IQSEC también ha identificado aplicaciones que ofrecen préstamos inmediatos a tasas de interés excesivamente altas. Cuando los usuarios no pueden cumplir con los pagos, estas aplicaciones pueden llevar a cabo acciones maliciosas, como el robo de información personal, fotos de las víctimas, e incluso bloquear los teléfonos con fines de extorsión para forzar el pago de la deuda.
Estas aplicaciones, en muchos casos, contienen malware, virus troyanos y spyware, que realizan llamadas y envían mensajes sin el conocimiento del usuario, recopilan información financiera y aumentan el riesgo de fraude. IQSEC ha identificado incluso el malware “Zanubis”, que se infiltra en los dispositivos a través de aproximadamente 40 aplicaciones que pretenden ser oficiales, con el objetivo de robar dinero a los usuarios.
